Montevideo es uno de los principales puertos para la flota pesquera gallega lejos de Vigo, Marín, A Coruña, Ribeira, Burela o Celeiro. Las instalaciones las utilizan cerca de 40 unidades que faenan en aguas internacionales en Atlántico Sur o en Malvinas (Falklands). Sin embargo, también hay algunas unidades con capital gallego que faenan en la zona económica exclusiva (ZEE) de Uruguay. Allí están, por ejemplo, el Playa Malvín de Gadimar o los buques de Belnova, a los que ahora se sumará una nueva unidad que apunta a rejuvenecer la antigua flota del país: el Río Solís IV.
Como apuntó este medio a finales de marzo, la otrora filial de Pescanova (hasta que cambió de manos en xx) decidió mejorar su flota con la compra del Sjúrðarberg para dar un reemplazo al veterano Río Solís III, un arrastrero congelador de 76 metros de eslora y 1.377 GT (gross tonage) que fue construido por Astilleros Construcciones (Ascón) en el año 1969 y que operó principalmente bajo el nombre Ila.
Como ya hizo con el Río Solís II, Belnova apostó por el astillero gallego Nodosa Shipyard para dar una segunda vida a esta unidad construida en los astilleros Skála de las Islas Feroe en 1987. Para ello, la armadora optó por una reconversión y renovación total que ha culminado con la botadura del barco de 60,3 metros de eslora por 13,4 de manga.
La reforma incluyó la participación de la auxiliar viguesa Kinarca, que se encargó de la renovación de de la parte de frío, así como de Josmar, la firma asentada en Mos especializada en la fabricación de parques de pesca y que ya en su momento se encargó de esa parte en el Río Solís II.
Por el momento, Belnova no sabe qué salida le dará al Río Solís III, pero sí que el nuevo barco partirá hacia Montevideo en septiembre para participar en la captura de especies como la merluza.
Fuente: Faro de Vigo